Que Franco Colapinto no deja de sorprender en la Fórmula 1, es algo que la mayoría de la gente ya lo sabe. Desde su irrupción repentina al torneo de motores más prestigioso del mundo defendiendo la camisa de Williams Racing, hasta su valentía y desfachatez para responder en las entrevistas haciéndole honor al prototipo ideal del argentino.

En medio de la segunda práctica del día del Gran Premio de Singapur, el piloto argentino, quien fue de mayor a menor, se mandó una de las suyas: superó a Max Verstappen cuando iban mano a mano en una curva del circuito callejero y el tricampeón del mundo, que recibió las chispas del monoplaza del pilarense, reaccionó lanzando una carcajada ¿irónica?

Si bien el holandés, que en las últimas horas fue sancionado por la FIA (Federación Internacional del Automóvil) por comportamientos inapropiados en cuanto a su vocabulario, no emitió ni una grosería cuando el corredor de Williams aceleró a fondo y lo pasó en una curva, denotó su fastidio al soltar una larga risa.

Ese hecho, no tardó en replicarse en las redes sociales, donde los fanáticos especularon con el verdadero sentido que le dio Max a su carcajada: ¿fue irónico o se rio sin ánimos de burlarse?, se preguntaban los seguidores de Colapinto, aunque no se pusieron de acuerdo con la conclusión.

Sin embargo, una de las teorías que circuló por X fue que esa risa que esbozó el corredor de Red Bull también la hacía “cuando su botón de radio se trababa”, indicó un simpatizante con conocimiento sobre el asunto.