Las medidas del Gobierno de Javier Milei están llevando a la población a una situación cada vez más desesperante de pobreza y crisis que parece no tener fin, y el “Presiduende” no para de sumar detractores, incluso dentro del campo del liberalismo económico que tanto alardea de representar.

Uno de los numerólogos ortodoxos que le saltó a la yugular al “Peluca” fue Carlos Melconian, el viejo compañero de campaña Patricia Bullrich, quien fue candidata presidencial enfrentada a muerte con Milei, pero que a la primera de cambio panquequeó y se acomodó sin tapujos como ministra de Mano Dura y Vino Tinto.

A diferencia de su ex compañera de ruta, Melconian nunca profesó cercanía con Milei y no se sumó a las hordas del PRO que se apresuraron a cambiar el amarillo patito por el violeta libertario, como si fuera lo mismo una cosa que la otra.

De hecho, quedó patente en el glosario de frases célebres de la política argentina su analogía para cuestionar la idea de dolarizar la economía que profesaba Javier Milei: “Me invitás a comer fideos con tuco, pero no tenés ni fideos ni tuco”, había ejemplificado Melconian meses atrás para graficar lo inverosímil de la propuesta del “León”.

Ahora, “Melco” regresó a la carga contra el “Javo” en una entrevista televisiva a la luz de la presentación del Presupuesto 2025, y volvió a sacar a luz el paralelismo entre la gastronomía y plan económico: "La gente no come superávit fiscal", advirtió, chicaneando al “Presiduende” y su banda de empobrecedores seriales.  

Al mismo tiempo, cuestionó la "devoción" del Gobierno por mantenerse "en el centro del ring" y controlar la agenda mediática con eventos como el del Congreso. "Es agotador, cansa", afirmó.

Siguiendo con su postura crítica, Melconian no ocultó sus dudas sobre la eliminación inmediata del cepo cambiario y el programa económico del Gobierno, alegando que el país no está en condiciones de eliminar el cepo de manera irresponsable, aunque reconoció la necesidad de hacer ajustes.

A la vez, argumentó que la administración de La Libertad Avanza muestra ansiedad por reducir la inflación, pero lo hace desde un enfoque político en lugar de un programa integral. "El enfoque termina siendo como si tuviera la cabeza de un presidente estadounidense: la reelección", señaló, y criticó la postura agresiva en el tema: "Esta cuestión de ocupar el centro del ring diariamente, se resuelva o no, el tema lo impongo yo, y a las 48 horas surge otro tema".

En otro sentido, volvió a tomar las críticas al Presupuesto 2025 y cuestionó los números presentados por Milei, incluyendo la proyección de una inflación del 18 por ciento y un crecimiento del 5 por ciento para 2025. "Al ritmo actual, una proyección de 18 y 5 parece un poco ambiciosa", indicó, y añadió que el programa del Gobierno está retrasado en comparación con planes anteriores como la convertibilidad o el Plan Austral.

Por último, advirtió sobre el riesgo de buscar una inflación del 0 o 1 por ciento sin antes resolver los problemas estructurales. "Será pan para hoy y hambre para mañana", vaticinó, sugiriendo que antes de lanzar un programa de estabilidad, es esencial controlar el déficit fiscal y evitar que quede inflación latente.