Según un informe de la consultora LCG, la inflación en el sector de alimentos y bebidas alcanzó un 1,8 por ciento en la primera semana de julio, elevando el promedio de las últimas cuatro semanas a un 4,2 por ciento, el nivel más alto desde la tercera semana de abril.

El estudio reveló que la mayoría de los aumentos de precios a principios de mes se concentraron en bebidas (4,8 por ciento), frutas (6,9 por ciento) y verduras (3,2 por ciento).

El 25 por ciento de los productos monitoreados experimentaron incrementos en sus precios, lo que representó un aumento de 5 puntos porcentuales respecto a la semana anterior.

En el análisis de las últimas cuatro semanas, las categorías con mayores aumentos fueron carnes (5 por ciento) y lácteos (7,3 por ciento).

Estos datos provienen de un relevamiento semanal realizado por LCG en 8.000 productos de alimentos y bebidas en cinco supermercados diferentes.

Previsión de inflación para junio y 2024

El último Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central (BCRA) prevé una inflación mensual del 5,2 por ciento para junio, una reducción de 0,3 puntos porcentuales en comparación con el informe anterior. Para el año completo, se espera una inflación del 138,1 por ciento, una disminución de 8,3 puntos porcentuales respecto a la encuesta previa.

En cuanto al IPC Núcleo, los participantes del REM proyectaron una inflación del 3,7 por ciento para junio, mientras que el Top 10 prevé una inflación núcleo del 3,9 por ciento para junio y julio, y del 114,7 por ciento interanual para 2024. Se espera que la inflación mantenga un mínimo del 4 por ciento hasta diciembre.

Consultoras del sector privado, como Orlando Ferreres & Asociados, estimaron la inflación de junio en un 6,6 por ciento, con una tasa interanual del 273,9 por ciento. La inflación "core" se situó en un 3 por ciento mensual y un 256,3 por ciento anual.

La consultora EcoGo, dirigida por Marina Dal Poggetto, estimó que la inflación de junio sería del 5,2 por ciento. Econométrica coincidió con esta estimación, situando el IPC de junio en un 5,2 por ciento, y atribuyó el ligero repunte al impacto de la recomposición de tarifas durante el mes.