El fútbol alemán sigue de luto. El último en morir, en la noche del lunes, fue Bernd Hölzenbein, exjugador de la selección germana que falleció a los 78 años. La Federación Alemana de Fútbol (DFB) lamentó públicamente su pérdida. Además de internacional, jugó y fue leyenda en el Eintracht.

Bernd Hölzenbein disputó 40 partidos con la Mannschaft y marcó cinco goles. En 1976 consiguió ser subcampeón de Europa y su mayor éxito fue el título en el Mundial de 1974. Fue una de las sorpresas positivas del equipo alemán. Después de que sólo fuera utilizado esporádicamente en la primera fase de grupos, a partir de la segunda ronda fue uno de los jugadores indispensables. En la victoria final por 2-1 en Múnich contra Holanda, una falta sobre él provocó el penalti que Paul Breitner convirtió para el 1-1.

Nacido el 9 de marzo de 1946, Hölzenbein se inició en las categorías inferiores del Eintracht y disputó 420 partidos de la Bundesliga con el club entre 1967 y 1981. Sólo Korbel, Jürgen Grabowski y Bernd Nickel han jugado más con los colores del Eintracht que él. El delantero lidera la tabla de goleadores de todos los tiempos del club, con 160 goles en la Bundesliga. También ayudó al Eintracht a conquistar la Copa en tres ocasiones (1974, 1975 y 1981), así como la Copa de la UEFA de 1980.