Luego de varias denuncias en los tribunales federales penales y ante la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC) por los efectos que originan el Fondo Estabilizador del Trigo Argentino creado en marzo de 2022, ahora se suma una denuncia judicial de la asociación civil, IMPULSAR, donde se acusa a Molinos Cañuelas y la Secretaría de Comercio de crear el FETA para “perjudicar a los pequeños molineros”.
“Existen serios indicios de que Cañuelas organizó el FETA a través de la FAIM y utilizó a la Secretaría de Comercio para su beneficio personal en detrimento de las necesidades reales del Estado y en perjuicio de los molinos”, dice en un tramo la denuncia presentada por la ONG y que fue ratificada ante la CNDC.
Los denunciantes expusieron que el Fondo Compensador se implementó durante la gestión del ex secretario Roberto Feletti con “requisitos de admisión y condiciones de funcionamiento que eran de cumplimiento leonino y ruinoso para las empresas molineras de menor dimensión que se venían recuperando y que así se veían excluidas. Se fijaban precios por debajo de los costos para las empresas chicas y un método de desfinanciamiento de su capital de trabajo. Sin embargo, Molinos Cañuelas y su controlada Molinos Florencia fueron los primeros en inscribirse para percibir el subsidio o compensación estatal”.
“De este modo, con un grupo reducido de empresas adheridas dejaron afuera a la inmensa mayoría de los 151 molinos harineros. Mientras tanto, el Grupo Cañuelas no solo pudo seguir funcionando pese a sus abultados pasivos sino que recuperó una porción del mercado que era ya abusiva e incluso la superó alcanzando un 29,52 por ciento ya a en Junio de 2022 y hoy logra una molienda que supera varias veces la que conseguía en el período de Enero Abril del mismo año, un 24%, con el absurdo de lograr 5 puntos más por mes y acumular en doce meses 60 puntos de excedente. Digamos que superó su cupo con creces. Eso sí, alguien se perjudicó. El segundo molino en el ranking de la molinería que compite en panaderías no alcanza a una participación del 4 por ciento y los restantes en promedio diputan entre un 2 y un 0,2 por ciento del mercado”, se indicó en un comunicado.
“Este impacto distorsivo del FETA fue ampliamente anticipado por diversas instituciones y especialistas del sector, quienes, además de ofrecer otras alternativas viables y de mayor eficacia, objetaron la utilización de estos mecanismos de intervención que ya en el pasado habían demostrado sus efectos negativos en el mercado interno como la ex ONCCA”.
“La Asociación Civil IMPULSAR confía en que esta denuncia por infracciones a las leyes de defensa de la competencia y por abuso de posición dominante por parte de Molino Cañuelas será investigada por la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia. A esta CNDC se le ha pedido concretamente la inhibición de la Secretaría de Comercio, además de una medida cautelar de suspensión del sistema y la aplicación de las multas que correspondan ante la gravedad de los sucesos y la inmediata suspensión del FETA como mecanismo distorsivo impulsado por las propias autoridades de la Secretaría de Comercio y la FAIM”, finalizó el comunicado.